lunes, 8 de septiembre de 2008

LA GRAN INVOCACION

LA GRAN INVOCACION

 

Desde el punto de Luz en la mente de Dios,

Que afluya Luz a las mentes de los hombres,

Que la Luz descienda a la Tierra

 

Desde el punto de Amor dentro del corazón de Dios,

Que afluya Amor a los corazones de los hombres,

Que Cristo retorne a la Tierra

 

Desde el centro donde la Voluntad de Dios es conocida,

Que el propósito guíe las pequeñas voluntades de los hombres,

El propósito que los Maestros conocen y sirven.

 

Desde el centro que llamamos la raza de los hombres,

Que se realice el Plan de Amor y de Luz,

Y selle las puertas donde mora el mal.

 

 BREVE EXPLICACION

 

Esta oración fue comunicada telepáticamente a Alice Bailey por el Maestro llamado El Tibetano, en el período de 1935-1945 cuando el mundo se enfrentaba odiosamente, lo cual llevó posteriormente a la Segunda Guerra Mundial.

 

Es fuente de inspiración de millones de personas en el mundo, quienes en la quietud de su corazón, solos o en grupo, meditan sobre ella. TE invitamos a que sea tu compañera de oración o de reflexión junto a tus otras oraciones.

 

La antigua Sabiduría siempre ha hablado que Dios tiene tres aspectos esenciales, llamados la Trinidad por diferentes religiones. Para el Cristianismo, es Padre, Hijo y Espíritu Santo.  Para los hindúes es Brama, Vishnu y Shiva. Para los antiguos egipcios es Osiris, Isis y Horus.

 

Detrás de esos nombres, están filosóficamente la Voluntad, el Amor- Sabiduría y la Inteligencia, los tres grandes aspectos de Dios. Por eso, la gran Invocación entrega un poderoso mensaje unificador porque se concentra en el mensaje que subyace en todas las almas de los seres humanos y en el alma de todas las cosas.

 

La primera estrofa llama a la Luz en la Mente de Dios, es decir, que venga la Inteligencia a la humanidad, para que desarrollemos un mundo más armónico con la naturaleza y con los ciclos evolutivos de todos los seres.  El discernimiento permite construir nuestra casa, nuestro mundo con los mejores materiales, sin destruir “la cantera”, es decir, nuestro Planeta. Harta falta nos hace una Inteligencia iluminada para enfrentar el desafío del calentamiento global y la falta de energía.

 

La segunda estrofa llama al Amor divino, para que despierte el amor en los corazones de los seres humanos. Y que mayor exponente del mensaje amoroso que Cristo, pero entendido como esperanza espiritual para todos los pueblos de la Tierra, independientemente del nombre que cada cultura le dé al gran señor del Amor universal. El amor es fuente de energía y de creación. Es fuente de unión, y la humanidad con sus diferencias es una sola. Sólo los que desarrollan el amor, sirven a todos los seres planetariamente. Esa conciencia amorosa universal es hoy una necesidad que deben desarrollar sobre todo los jóvenes para unir al hombre del mañana y erradicar tantas guerras, odios y explotaciones.

 

La tercera estrofa llama a la Voluntad divina, a que inspire a cada ser humano a lograr su identidad con su chispa interior, y busque el propósito de trascender sus limitaciones   hacia la inmensidad del Cosmos. Dicen los antiguos sabios que “ el ser humano es un ser espiritual, teniendo una experiencia humana”. Comprender el propósito divino en la evolución de la conciencia es una gran misión, propósito que los grandes Maestros de la Humanidad conocen y sirven.  La intuición del Ser, de lo Uno que está en nuestra altura brillante e inmarcesible, da una enorme fuerza para enfrentar la adversidad y vivir realmente como soñamos. Tal vez caigamos, pero la Voluntad nos levanta una y otra vez. Esa férrea Voluntad, pero a la vez Amorosa, Sabia e Inteligente, es lo que destaca a los grandes seres humanos que en la Tierra han existido y que por sus méritos son los líderes de la humanidad. La tradición les llama los Grandes Iniciados, Sabios, Maestros de Sabiduría, la Jerarquía Blanca, La Logia Blanca. Cualesquiera sea el nombre que se les dé a estos amautas, a estos grandes seres, Ellos conocen el plan evolutivo de la humanidad y del universo. Conectarnos intuitivamente con al visión de que existe un plan evolutivo para las especies, pero junto a un plan evolutivo de la Conciencia, es lo que nos va a permitir penetrar en el alma de las cosas, como también nos va a permitir una conciencia más sabia. Así se inicia el Sendero del Discipulado o el Camino de los Trabajos de Hércules. Es la transformación paulatina de nosotros de meros habitantes a grandes ciudadanos conscientes del mundo. Y nos vamos haciendo hermanos de la realidad misma.

 

La cuarta estrofa destaca que la Humanidad como un todo es un gran centro de evolución de la conciencia, porque los seres humanos tienen la chispa de la divinidad dentro suyo. Y por lo tanto, por su persistencia y dedicación podemos vivir responsablemente el Plan de Amor, y de Luz para el desarrollo total de la humanidad como de todos los demás seres que viven en la Tierra y que dependen también de las acciones del hombre. Esta estrofa nos llama a ser prácticos para aplicar las visiones espirituales armónicamente conjugando el Amor y la Inteligencia simultáneamente.  Es decir, Mística y Ciencia actuando conjuntamente. Y también con ese discernimiento amoroso, seremos capaces de actuar con Buena Voluntad para llevar a cabo la visión de una sociedad armónica,  haciendo desaparecer la ignorancia fundamental de lo que es ser humano, lo cual  sellará definitivamente las puertas al mal.

 

Maravillosa oración, plegaria, fuerte e iluminada que está uniendo hoy día a millones de seres humanos en la Tierra. Te invito a meditar sobre ella para que la hagas tuya.  

fenixterra1@gmail.com